sábado, 9 de octubre de 2021
ARLES GAMEZ, "GENTE CON SABOR A HISTORIA" POR JUAN QUINTANA
“Gente con sabor a historia”
Arles Gámez
Por: Juan Quintana.
...Sabes a historia, sí, sabes a historia, claro, eres historia,
tu memoria infalible te delata…, sabes a historia, entre las arrugas de tus manos,
se esconde ese sabor inconfundible a
pueblo, a historia.
Sin
duda alguna sabes a historia, si, a ése sabor tan característico que al solo
verlo se nos hace la boca agua, porque es el mismo sabor a pueblo…, Ud. sabe a
esa historia adornada con alguna nota musical, que fluye deliberadamente del
clarinete de Evencio, tu padre, de ese sabor tan particular que quedó plasmado
también en sus óleos, tal vez en algún cartón viejo, algún latón oxidado o en
un simple lienzo.
Desde tu niñez te impregnaste para
siempre, de espacios, de gentes, del fresco
aire decembrino, del agua de tu quebrada, de los bancos de madera de tu vieja y
añorada Plaza, a escasos 20 metros de tu casa,… tus huellas deben estar aún
marcadas en algún guatacaro de esas improvisadas mangas de coleo, en cualquier
calle de tu pueblo…y tú voz seguramente ha quedado grabada, en el aire, en las
hojas de los árboles, en las paredes de tu Iglesia, en los bancos de tu Plaza
Bolívar, en esos conciertos
espectaculares, que tradicionalmente llámanos “tertulias pueblerinas”, pero que
en realidad son más que eso, son “verdaderas
cátedras de historia”, de esa historia que sabe a ti.
miércoles, 6 de octubre de 2021
domingo, 3 de octubre de 2021
"LA BAJADA DE PACHECO" PRODUCCION Y NARRACION: JUAN QUINTANA
A ti, Antonio Pacheco.
Por Juan Quintana.
Hoy, quizás el misterioso hombre, debe estar
preparando las alforjas con su carga muy pesada, para comenzar su sigilosa
bajada, por un camino tortuoso, desde
las entrañas mismas de su imponente montaña, con sus burros, con sus flores,
con sus sueños,
Él sabe que
el tiempo se le acorta, y que tal vez solo habría que esperar unas pocas lunas,
para que su espléndido Valle sienta su presencia, como antes, como siempre…, y
llegará en algún momento, y nos impregnará con su fresco olor a roció mañanero.
Y seguro
estoy, que su llegada, nos sorprenderá gratamente, y su brisa fría golpeará
nuestros rostros y penetrara nuestros poros, y sus pasos también se sentirán, a
solo diez leguas de distancia, aquí, en nuestro hermoso Charallave, que quedará
contagiado, sin duda alguna, de tan esperada bajada, de la bajada de Pacheco,
de aquel humilde galipanero, que con sus flores, con sus burros y con sus
sueños, y que tal vez huyendo del intenso frio, logró marcar, para siempre, una parte importante de nuestra historia cotidiana.
viernes, 1 de octubre de 2021
PANADERIA "LA MIRANDINA" Y SU OFERTA EN PAN DE A LOCHA. PRODUCCION Y NAR...
“LA MIRANDINA”
Y SU OFERTA EN PAN DE A LOCHA.
POR: JUAN QUINTANA
¡Pan de a locha, pan de a locha!,
¡Llévalo que se termina!,
¡Llévatelo calientito!,
aquí en La Mirandina.
En la Calle Real de otrora,
es decir, Calle Bolívar,
y como
estampa emotiva
o recuerdo
que hoy aflora,
se estableció, con gran lujo
casi al estilo francés,
un local de un portugués
que vendía a trocha y mocha,
el sabroso “Pan de a locha”,
con ofertas pa’ escogé.
Si comprabas solo uno,
una locha te costaba,
y tres por medio te
daba
en el momento oportuno.
Pero la oferta seguía,
cinco por tan solo un real,
pero además podías llevar
siete por real y cuartillo,
eso sí, llevando sencillo
para los panes pagar.
El portugués en cuestión,
para ganar la clientela,
te daba un trozo e’ panela,
es decir, de papelón.
Pero la cosa era en serio,
y botaba de gran gana,
la casa por la ventana
dando diez por un Bolívar,
es decir con dos de chiva
como oferta lusitana.
El “Pan de a locha” les digo,
era un pancito pequeño,
con origen caraqueño
hecho de harina de trigo.
Su sabor inconfundible,
calientito y bien crujiente,
preferido por la gente
de aquellos tiempos pasados,
solito o acompañado,
una delicia evidente.
La panadería en cuestión,
que en verdad era muy fina,
se llamó “La Mirandina”
con ofertas a montón.
Hoy solo queda el recuerdo
o remembranzas tal vez,
de gente con calidez
en unos años dorados,
de un Charallave añorado,
¡De un pueblo que se nos fue!
PD: En mayo de 1961, procedentes de Algarve Portugal, llegan a Charallave José
Rodrigues Farías y Emilia Sevino Neto, acompañados de su única hija Adelia.
En ese mismo
año, compran la ya existente “Panadería la Mirandina”, la cual estaba ubicada
frente a lo que es hoy Residencias Barrialito, en las cercanías del antiguo
Telégrafo que dirigía Don Pedro Tarife.
En el año 1971, los esposos José Rodrígues y Emilia
Sevino, deciden traspasar la Panadería Mirandina, y finalmente en el año 1973,
regresan, definitivamente a su país
natal, Portugal.
Fuentes Originales:
Adélia Neto Farrias
Clara Graca
Linda Fernándes.
Diácono Carlos Ramón González.
José Méndez Farrera