CLARA Y CARLOS ………
“UN AMOR QUE PASO DE LO HUMANO A LO SUBLIME”
POR: JUAN QUINTANA
Con seguridad este no es el estilo al cual
estoy acostumbrado a escribir para recordar gratamente la cotidianidad del
Charallave de antaño, esto no es, evidentemente, “Una Historia Poco Contada”
de aquel viejo Charallave en el cual muchos de nosotros quisiéramos haber
vivido. pero quise hacer un alto en el camino para compartir con Uds. , en
breves líneas , un hecho que he venido observando con enorme alegría , llamándome
poderosamente la atención y que me ha llevado a constatar la grandeza infinita
a la cual Dios nos tiene acostumbrado pero que muchas veces , por infinidad de razones , “no
queremos o no tenemos la capacidad de
apreciar “ , pero por
suerte , esta vez de una manera extraordinariamente
tangible , pude palpar que el verdadero
amor , “aquel que pasa de lo humano a lo sublime” estaba allí , en mi
presencia y no dude un segundo para
toparme con ellos frente a frente y
quizás pecando un poco de imprudente al mirarlos fijamente y escucharlos con detenimiento
, me di cuenta que los amores eternos de Clara y Carlitos efectivamente pasaban de “lo humano a lo sublime” ,
note su pureza , su fidelidad , note el
amor desnudo en su máxima expresión , note su entrega total del uno para con el
otro pero además y esto es quizás lo más
importante es que vi en sus caras , en sus expresiones , en sus respuestas a
infinidad de preguntas que les hice en solo
unos minutos , su encantadora ingenuidad ,
descubriendo , tal vez , que ese era uno
de los detalles por el cual Clara
y Carlitos se aman infinitamente sin ningún tipo de prejuicios ………
Carlitos es para Clara
su confidente, su chofer (en su confortable e inigualable silla de ruedas), Carlitos
es su guía turístico y la tiene acostumbrada a diario a dar los paseos por su
pueblo natal sin importar lo intrincado de una subida o una bajada, lo
inclemente del sol o lo copioso de una lluvia, del peligro del día o de la
noche, sin diferenciar un lunes de un domingo o de un día cotidiano a uno
feriado,
Clara y Carlitos duermen juntos y cada mañana , al despertar
Clara
, no le falta en su mesa la arepa preparada por
Carlitos
,..no duda en lavar su ropa , limpiar la casa ,
hacer los mandados y encargarse de gran parte de los quehaceres
diarios convirtiendo lo rutinario en su razón de ser y existir …….al concluir
la faena diaria vemos nuevamente a Clara y a Carlos en las calles de mi pueblo en su emocionante
e interminable recorrido turístico o lo que pudiéramos llamar en su acostumbrado paseo cotidiano a
cualquier hora del día ….…
Carlos Serrano hoy tiene 43 años de edad y es el penúltimo de los seis hijos de Clara
Delpiani y definitivamente el amor de su vida , aunque el amor de madre no tiene diferencia
entre sus hijos note, siendo lo más objetivo posible , “lo especial” que significa Carlos para Clara …… Dios sabe lo que hace , siempre,
siempre Dios sabrá lo que hace , Dios no se muda él está ahí
cobijando a cada instante con su amor infinito a Clara y a Carlitos y tal vez Carlitos pudiera estar pensando dentro de su misma
ingenuidad y con ese Don “ tan especial “ emanado de lo
divino y parafraseando un poco aquella
canción de los años 60 interpretada por “ The Hollies “ “ no es una carga es mi hermano
“ pudiéramos decirlo, sin temor a equivocarnos, que en su mente retumbara en cada instante
,..”
no es una carga …es mi madre “…
Definitivamente el amor está ahí , en cualquier esquina , en
cualquier rincón o cualquier calle de nuestro pueblo , pero quizás por la misma
situación tan agitada y tan
convulsionada que estamos enfrentando
pudieran pasar ante nuestros ojos
muchas maravillas de la vida pero
que en realidad no la vemos , no la
percibimos con el valor y contenido que lleva consigo , pudiéramos ver el arcoíris pero no detallamos
su inmensa belleza reflejada en mil colores , sentir un amanecer o un
atardecer con un alba refrescante y un ocaso tranquilizador y para
nosotros pudiera ser vulgarmente común , divisar desde un balcón la lluvia caer quizás solo nos lleve a pensar en la
necesidad que tenemos del vital líquido pero no de lo hermoso y benevolente que es la naturaleza con
nosotros , Dios permita que alguien
más al ver por estas calles de mi pueblo
a Clara y a Carlitos en su
acostumbrado “Recorrido Turístico” pudieran sentir la misma sensación que yo
tuve al ver un amor puro que sin duda paso “de lo humano a lo sublime
“…..
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