LA HISTORIA POCO CONTADA
“ HOY MARTES 31 DE DICIEMBRE DE 1974”
POR . JUAN QUINTANA
Esta es
parte de la historia más sencilla de nuestro pueblo , la cotidianidad de aquel
hermoso pueblo de calles empolvadas , de aquel pueblo apacible con gente amable
, de aquel Charallave con sus costumbres
, tradiciones , personajes populares , anécdotas , leyendas y su
historia…, de esa hermosa historia
que aun mantenemos latente en “El Adobe Pueblo de Antaño” , de “ La
Historia Poco Contada ” como
la de “ Aquel Martes 31 de Diciembre de
1974 “ .
Aquel día
Martes, 31 de diciembre de 1974 , desde
tempranas horas de la mañana, los preparativos estaban bastante adelantados en
la mayoría de las casas de aquel tranquilo Charallave de cuatro décadas atrás , el agradable olor que
se esparcía por el vecindario, del
delicioso dulce de Cabello de Ángel o el popular y no menos sabroso
Dulce de Lechosa , las hallacas y bollos hechos en leña , el pernil o el pavo
relleno , la tizana con el vino Castel Gandolfo o el propio “ Sagrada Familia “ , “la leche e’ burra” , el
ponche crema casero o el tradicional de Eliodoro
González P , quizás una botella de ponsigué con más de seis meses de maceración
, la guarapita de parchita o el famosísimo “Zamurito” que vendían en Cua[JQ1] …, el esmero de
pulir el piso con esperma y kerosen
o con la famosísima cera Beautiflor
en pasta , el retoque final a las
paredes, con pintura de avestina mezclada con pencas de sábila y sal…, y mientras
el día transcurría con la cotidianidad de la época , se dejaba oír a
todo volumen , en el viejo “picot” (pick up) de la abuela o en el sofisticado y súper
novedoso equipo “ 3 en 1 “ marca Phillis
,a Tony Camargo y la canción “ yo no olvido el año viejo” o al guarachero de siempre “Cheo García “ con “cantares de navidad” ,del músico puertorriqueño
Benito de Jesús, o la canción “ año
nuevo vida nueva” del compositor colombiano Pedro Juan Meléndez .
Mientras
tanto, recibíamos a los
vecinos en el tradicional intercambio de hallacas, con aquel famoso
comentario que caracterizaba a la gente humilde de nuestro pueblo : “ mi mamá le manda estas hallacas y que por
favor la disculpe porque cree que no le quedaron como las del año pasado…, ah , , y que las que ud les
mandó están tan deliciosas como todos los años “ .
La
rivalidad entre los “guapetones del pueblo arriba” y “los del pueblo abajo” ,era silenciada con una
especie de tregua de fin de año que hacían durante estos días decembrinos , porque para nadie era un secreto , “las
tanganas” ( por supuesto pasajeras ) que se formaban entre quienes decían ser
los “ chicos malos del pueblo abajo” y
“los chicos malos del pueblo arriba “ …, a
la par de estos momentos “La Casa Mixta” de
Firmo Damasceno , mostraba sus ofertas en uvas , aceitunas ,
alcaparras y demás insumos propios de
esta tan esperada fecha , y de igual forma el mercadito de los hermanos Otamendi
, a un costado de la Plaza Bolívar , ofrecía
su variedad en verduras y hortalizas ,
hojas para hallacas y las gallinas pica
tierra…, ya los estrenos de los más
pequeños comprados en “ La Nueva Tienda”
, estaban listos y almidonados a la
espera de la noche , los muchachos con
el entusiasmo de ir a la bodega de Bidú o a la de Chucho Torres para
comprar “ casi clandestinamente” la
papeleta de “Salta Perico” , “ los silbadores” o “el tumba rancho” …, los
sempiternos lanzadores de cohetes se apertrechaban varios días antes para dejar
oír , justo a las doce de la noche , los doce cohetazos que marcaban la
despedida del viejo año y el renacer del año nuevo , que seguramente traería
felicidad a los Charallavenses .
Todos sabíamos casi con un mes de anticipación ,que ese día, martes 31 de Diciembre de 1974 , a partir de las 8 y quizás
hasta un poco antes de la misa de medianoche , el ilustre y recién
creado Concejo Municipal , presentaría
en la Plaza Bolívar al grupo orquestal “La Sexta Sociedad” con su extraordinario cantante Gustavito Farrera ,con apenas un poco menos de 20
años , acompañado de Igor Pilin Bodewing
, Oscar Ortiz , Freddy Peña , Eduardo Correa , Efraín Núñez , Ariel Ortiz, Carlos
Guzmán y Asdrúbal Méndez , ahí, en
la Plaza, en esa misma y vieja Plaza con árboles frondosos , estaríamos
escuchando , con toda seguridad , el pasodoble “ La Violetera” , “ El Vagabundo”
de Nicola Di Bari , “Debut y Despedida”
de los Ángeles Negros , “ El Porro “ y
sin duda ,sus temas originales como “El Pato Guiriri” , “Catirita Linda” o
cualquier tema moderno como el de La Formula V
“ Cuéntame” o cualquier otro con “ letra musiua” , ya que “La Sexta Sociedad “ , era una de las agrupaciones más variadas y versátiles de Venezuela .
Algunos coterráneos preferían quedarse en su casa y recibir el
nuevo año en familia , escuchando al final de la noche casi con lágrimas en los ojos, aquel poema
que comenzaba diciendo : “ Madre : esta noche se nos muere un año , en
esta ciudad grande , todos están de fiesta……….” , era “
Las Doce Uvas del Tiempo “ de Andrés Eloy
Blanco , o simplemente mantenerse en sintonía de las emisoras
am “Radio Valles Del Tuy” de Ocumare , dirigida por Eleazar Ramos Bermúdez
, con la programación “Despidiendo al Año Viejo”
con Julio Cesar Marcano y los consiguientes mensajes navideños de : “La Casa de los Retazos” frente a la Plaza Bolívar,
o del “Teatro Cine Ocumare” diagonal a la misma Plaza Bolívar, o nuestra única emisora local “ Radio Guaicaipuro” dirigida
por Álvaro Sarmiento y la inconfundible voz del reconocido
locutor Claudio Lairet , patrocinado
por: “ La Botica Vargas” , “Almacén Pelopidas”
, “La Nueva Tienda” o la “Farmacia Charallave” , a la cuenta de los últimos minutos del viejo
año con el tema musical “ Cinco pa las Doce
“ cantado por Néstor Zavarse , luego
el Himno Nacional y el consiguiente abrazo fuerte de “ feliz año “ …, luego de las doce de la noche, las visitas casa por casa no se hacían esperar, para dar el feliz año y ser
recibido con un “guamazo de ron “
una hallaca o un platico con dulce de lechosa y por supuesto se aprovechaba el momento para
“echar un pie” con alguna pretendida ….
; otros por su parte , se quedarían
en la Plaza Bolívar para disfrutar del
concierto de “ La Sexta Sociedad” y luego entrar a la Iglesia para recibir el nuevo año y
compartir la misa de 12 , la cual era oficiada por el recién llegado Cura Párroco Alfonzo
Gutiérrez .
Al día
siguiente, al despuntar el alba de aquel primer día del año 1975, la parranda continuaba y no podía faltar bajo ningún concepto, el
sancocho de gallina “pica tierra” para sacar el ratón de aquella larga y muy
agitada noche del martes 31 de diciembre de 1974. Así transcurría ese 31 de diciembre , de hace
apenas un poco más de cuatro décadas, en un pueblo como el nuestro, marcado por un
incipiente desarrollo industrial …, pero hoy sentimos que
nos embarga la nostalgia, porque
lastimosa e inevitablemente , hemos dejado
atrás “ el
despertar de madrugada para ir a las misas de aguinaldos , hemos dejado en
el olvido el sabor de las exquisitas e inigualables arepitas
dulces de la familia Pacheco en Curaciripa
o de la familia Cestari en el pueblo abajo , el largo caminar en compañía de amigos hacia La Silsa después de la
misa de aguinaldos , quizás también
, y de manera “ casi obligatoria” , hemos cambiado
el alegre compartir entre las familias del pueblo y el caluroso abrazo
de fin de año, por un “frio feliz año digital” a través del twitter , Facebook
, Whats app o Instagram …, ya no
escuchamos el sonido contagioso del grupo
Aguinaldero Santa Rosa o el de los Mensajeros de la Gaita , nos embarga la
nostalgia al recordar la venta de cotufas
de Luis Higuera , o “Las Lapas “ de Pachequito, o el crujiente Maní de Felicia , o el pregón de Sanabria , o la casa de Melania
Bello con sus honorables huéspedes ,
o a Eugenio Infante con sus
tradicionales y famosos globos de papel
de seda lanzados al cielo , o “Los Vermues
domingueros” en el Club El Campito , Los Peñones o Club el Canario, o el olor y el sabor a pueblo , a nuestro
pueblo , a ese mismo pueblo llamado Charallave
que aún tiene infinidad de “Historias Poco Contadas “ .
Reciban todos una feliz navidad y un venturoso año 1975
Y como en oportunidades anteriores, solo le pedimos,
por favor, compartir esta “Historia Poco Contada”, para que las nuevas
generaciones conozcan un poco sobre las costumbres de nuestro pueblo, y además, para que los que vivieron esa época
de oro, puedan recordar con mucha alegría, pero seguramente con algo de nostalgia, un pasaje inolvidable de aquel Charallave de Antaño.
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